Presentación

Enfrentamos un mundo en permanente cambio. Con mayor recurrencia, encontramos fenómenos naturales extremos, el impacto de la actividad humana sobre el ambiente, desafíos en salud pública para manejar viejas y nuevas enfermedades que afectan además de la salud, la estabilidad económica de los países. Al mismo tiempo, debemos seguir atendiendo necesidades básicas, como el acceso al agua potable, reducir el hambre y luchar como tener un ambiente sostenible teniendo cada vez más población y mayores necesidades de energía y explotación de recursos naturales, entre otros. En contraste, somos testigos de uno de los momentos de mayor desarrollo científico-tecnológico e interacción jamás imaginada y con el reto que hay mucho por construir, con nuevas oportunidades para todos.

Para atender todos estos retos cada vez más complejos y oportunidades, se requiere de un gran talento, en especial en la ingeniería, que, por su definición y compromiso con la sociedad y el desarrollo, debe tener un papel protagónico. Es posible afirmar que los países con mayor desarrollo cuentan con una ingeniería fuerte que ha sido líder para lograrlo. En los demás países se han dado algunos logros, pero hay mucho por realizar. A la vez es posible indicar que la participación de la mujer no ha sido la esperada en ninguno de los escenarios. Dar una única explicación es muy complejo, porque la brecha de desigualdad e inequidad con las mujeres ha sido histórica en lo social y en lo técnico, minimizando la importancia de sus aportes a la sociedad. La ingeniería también ha tenido este comportamiento al no reconocer como debiera, a las contribuciones de las mujeres en esta área. El Foro Económico Mundial, en este sentido expresa:

Las mujeres representan la mitad de la población mundial, necesitan los mismos recursos y se enfrentan a los mismos retos
mundiales —a menudo en situación de desventaja— que la otra mitad.

A pesar de ello, muchas menos mujeres están implicadas en el diseño y el desarrollo de soluciones inteligentes y sostenibles
basadas en la tecnología que nos permitirían a todos mejorar nuestras vidas…

… Atraer y apoyar a más mujeres ingenieras redunda en beneficio de todos, ya que aumenta el potencial para desarrollar
soluciones inclusivas e innovadoras para los complejos problemas a los que se enfrenta el mundo.

Además de la deuda histórica con las mujeres, es claro que su papel en la ingeniería va más allá de lograr una participación en número equilibrada, sino que es un aporte central para el desarrollo social y económico. Como parte de este ejercicio, se hace necesario que, desde la formación en ingeniería, se entienda que los aportes y trabajo sobrepasan los aspectos propios de la disciplina, sino que hacen parte de un modelo que deberá conducir a un mundo mejor.

Para lograr que la participación de las mujeres en la ingeniería sea exitosa, deben revisarse los estereotipos y creencias erróneas que solo han contribuido a generar el desinterés por esta profesión. Como aporte, en el libro Matilda y las mujeres en ingeniería en América Latina II, indica:

Las niñas y mujeres necesitan poder observar modelos con los cuales identificarse. Mujeres fuertes, inteligentes y exitosas que aparecen
en la historia, para que cuando una niña o una adolescente abra un libro, haga una búsqueda en Internet o prenda el televisor, se encuentre
con mujeres que tengan las mismas vocaciones científicas que ella, o que ya trabajaron en el mismo campo de investigación tecnológica
que a ella le interesa...

Esta es una de las múltiples líneas que se deben considerar y desde el trabajo de todos aportar para que se logre un verdadero incentivo sobre su participación como parte central del modelo de desarrollo de una región, de un país y del mundo.

Es claro que:

Si tenemos alguna esperanza de que los Objetivos de Desarrollo Sostenible se logren de aquí a 2030, debemos valernos de las
capacidades y el talento de hombres y mujeres por igual, y ello implica seguir trabajando para crear un entorno más propicio para
que las mujeres estudien, trabajen y prosperen.

Las mujeres pueden realizar una importante contribución a la hora de crear un mundo más igualitario.
Solo hay que darles las mismas oportunidades.

Estamos en un momento histórico y no podemos ser inferiores a este gran reto.

Giordano Lerena, R.; Páez Pino, A. (2020). Matilda y las mujeres en ingeniería en América Latina 2. Universidad FASTA Ediciones https://es.weforum.org/agenda/2020/03/para-construir-un-mundo-mas-sostenible-haran-falta-mas-ingenieras/